La Entrevista Psicológica
El principal objetivo de la entrevista psicológica es poder evaluar si la persona entrevistada puede continuar o no con el proceso de selección. Para ello se realiza una entrevista semi estructurada. Eso significa que no se basa tanto en una conversación entre entrevistador y entrevistado de una forma espontánea, sino en algo ya establecido y estructurado.
Las preguntas del entrevistador suelen ser las mismas pero formuladas de un modo distinto, de este modo se logrará esclarecer si el entrevistador es coherente, tiene claro lo que quiere, su motivación profesional y los logros que quiere alcanzar.
Por su parte el entrevistador no sólo se tendrá que basarse en escuchar lo que responda el entrevistado, sino también en analizar su comportamiento, los mensajes no verbales que emita y la gesticulación, todo ello conformará la expresión corporal del sujeto.
Luego, en la segunda etapa de la entrevista, se investiga más profundamente al entrevistado. El entrevistador seguramente habrá realizado anotaciones sobre la primera etapa e iniciará los interrogantes que hayan quedado en el aire para reformularlo en la segunda etapa.
Los entrevistadores psicológicos estudian profundamente la vida laboral del entrevistado, por lo que a pesar de que el candidato intente dejar la mejor impresión sobre su trayectoria profesional habrá que poner especial cuidado en aquellos puntos en los que más se flaquee, pues es ahí donde seguramente el entrevistado ahonde más.
Este tipo de entrevista suele finalizar en una conversación un tanto ajena al mundo laboral, buscando un poco más conocer las aficiones del candidato, sus hobbies, aquellas actividades que gusta realizar fuera de las horas de trabajo y que completan la forma de ser del candidato/a.